Desde el momento en que naces has estado expuesto a los influjos de la gente que te rodea, en parte eso es lo que se llama educación. Durante el crecimiento las cosas no son distintas, por el contrario sientes más acentuadamente el influjo que ejercen los demás sobre tu comportamiento. Por razones de carácter, pudiera ser que esos influjos te afecten profundamente y lleguen a determinar las decisiones que tomas y las conductas que asumes.
Aunque muchas personas por falta de energía espiritual se somete a los influjos de otros, no toda la gente acepta dócilmente tales influencias, después de todo tenemos eso que se llama criterio y no tenemos que hacer todo lo que nos sugieren. De cualquier manera, no por atender a alguna influencia nos convertimos en tontos pero, siempre es preferible vivir según y como nos lo dicte nuestro albedrío.
Te vamos a mostrar los cinco signos que prefieren actuar según su propio criterio.
En el número uno tenemos a Acuario
El caso de Acuario es interesante en razón de su carácter sensible. Sus actitudes ante la vida hacen que no se deje llevar por tendencias de comportamiento que provengan de ninguna fuente y menos si lo que se busca con tales influencias es la obsesión de las personas por cosas sin valor real. Acuario se respeta demasiado a sí mismo como para sucumbir a la presión de cuestiones que no tienen corazón.
Acuario sabe elegir, si las cosas que se le proponen no tienen sentido para él, sencillamente no le presta atención. Según sea la situación y el escenario en el que se encuentre, sabrá cambiar de actitud si esto resulta necesario, pero en lo que no cede es en dejarse manipular por factores externos a su criterio.
La gente de Acuario es muy inteligente y es capaz de ver las cosas desde diversos puntos de vista. Esto le permite respetar las elecciones de los demás sean cuales sean. Lo que no tolera es la actitud impositiva de alguna gente que quiere que los demás sigan sus dictados.
En segundo lugar se ubica Sagitario
Semejante a la clara posición de Acuario, la gente de Sagitario es tan inteligente que tampoco se deja seducir por los dictámenes de otras personas; menos aún si esas personas piensan que son más importantes y mejores que las demás tan solo porque decidieron seguir una pauta que, por otro lado, es seguida por muchísimas personas. Sagitario defiende su personalidad y elecciones a capa y espada y no acepta imposiciones de ninguna clase y de ninguna persona.
Sagitario es demasiado independiente como para andarse por la vida preocupado por estar al día con el rumbo que lleva el mundo. Además de esto, y hay que reconocerlo, también le resulta molesto verse obligado a actuar según los gustos de personas muy diferentes a él, las veces que lo ha intentado en muy poco tiempo ha perdido todo interés y prefiere continuar la vida a su aire
Para ti resulta mucho más cómodo tomar las cosas como se te aparezcan y si te apetecen las tomas y si no, pues no y se acabó. No te interesa preocuparte demasiado por detalles externos que no te dejan nada de provecho. Por otro lado, está claro que lo que es común no te atrae en absoluto.
Aries está en tercer lugar
En vivir aventuras está la gracia de Aries, andarse siempre probando cosas diferentes y desconocidas es lo que te vale, variar siempre es lo que te da más placer. No tienes el más pequeño interés en andarte por la vida esperando a ver qué se está haciendo en el momento para ponerte a la cola. Eso no va contigo, no vas a malgastar tu preciosa energía esperando que otros digan qué debes hacer.
Además de esto, tienes suficiente experiencia como para entender que si te ha de ir bien en la vida, eso será si te mantienes apegado a los lineamientos que emanan de tu corazón, además bien sabes que la otra cara de tu moneda es la espontaneidad y no la imitación. La invención y la creación han sido siempre los fundamentos de todas tus aspiraciones, nunca te ha salido bien el andar repitiendo líneas que otros han seguido.
Sabes también que la fuerza de tu espíritu te empuja en la dirección de alcanzar todo aquello que te propones; esa terquedad nunca te ha hecho ningún mal.
En cuarto lugar está Escorpio
Ser individual no es lo mismo que ser egoísta, simplemente es ser diferente a los otros, así acostumbra ser Escorpio. Cuando te involucras en las cosas, lo haces a fondo pero si eso significa hacer lo que otra gente hace o sigue, ya no te parece tan divertido. Tu actitud innata es ser como tú y no como nadie más, y en eso te destacas de buena manera.
La cualidad especial que te describe es la intensidad que pones en tus emociones y en todo lo que haces y una actitud como esta siempre te empuja más allá de lo que propone cualquier tendencia. Indagas a profundidad, siempre pides más, quieres estar al tanto de todo y no andar a ciegas por la vida, el saber lo que hay que saber es tu motor de búsqueda.
Esa personalidad muy bien definida te salva de ceder a la tentación de seguir el camino que siguen los demás, no es cosa que sea de tu preferencia aunque tu curiosidad te lleve a hacerte preguntas alrededor de las corrientes que suele seguir la gente.
Por esta cualidad tan especial de mantenerte firme en tus elecciones individuales, pudieras deshacer cualquier tendencia si es que te lo propones, solo se trata de que te decidas tomar la iniciativa.
En el quinto lugar está Leo
La independencia y seguridad que caracteriza a la gente Leo es enfocas palabras su defensa natural a la posibilidad de andarte haciendo lo que los demás hacen. En todo caso quien siempre puede señalar el rumbo a seguir es Leo. Mientras otros piensan ya Leo ha emprendido su camino, acostumbra ir de primero en cada aventura que se inicia. ¿Seguir a los demás? Eso no funciona contigo.
Si acaso sigues una tendencia esa es la de sobresalir en cada cosa que haces, eres lo suficientemente inteligente como para hallar razones personales para llevar a cabo todas las cosas que estimulan tu curiosidad innata. Cuando tienes una idea bien definida entre ceja y ceja, no dejas que las dudas te tomen de sorpresa, siempre vas en primer lugar.
La gente suele ver tu seguridad e independencia como si se tratase de arrogancia o de complejo de superioridad, la gente que te rodea no entiende que es un asunto demasiado importante para ti encontrar tu propia manera de hacer las cosas y no seguir las huellas de otros por más claras que puedan aparecer en el camino.